Texto:
Romanos 5:12-21
Tema:
Resultados de las vidas de Adán y Cristo
I.- INTRODUCCIÓN
En los versículos 1 al 11 de este capítulo, encontramos los
beneficios espirituales que nos ofrece Cristo por medio de la fe en Él. Ahora,
en los versículos 12 al 21 vemos una comparación de los resultados para la raza
humana de la vida de Adán y de la vida de Jesucristo. Son resultados totalmente
opuestos, unos negativos y otros positivos. Dos decisiones diferentes con
resultados diferentes para la humanidad.
En estos versículos vemos lo que ofrece la naturaleza humana
normal y lo que nos ofrece Cristo.
II.- DESARROLLO
1.- Adán introduce el pecado y la muerte: (5:12) El pecado (distorsión
moral) entró (pasó, penetró) al
mundo, a toda la creación en la tierra por medio de Adán; no dice sólo a la
raza humana. Junto con el pecado vino la muerte que se había prometido por la
desobediencia, esa muerte pasó (extendió,
recorrió, atravesó) a toda la raza humana por cuanto el pecado está en
todos desde Adán (Génesis 2:17).
2.- Reinado (gobierno)
de la muerte: (5:13,14) El pecado y
la muerte estaban en el mundo desde que Adán pecó, pero la conciencia de ello
se hizo palpable cuando Dios introdujo su ley. No importaba si se había
cometido el mismo pecado que cometió Adán, el pecado y la muerte resultante
estaban presentes. La ley produce conciencia de pecado, ese es uno de sus
propósitos. Para castigar a un niño primero hay que decirle las reglas, esa es
la idea de estos versículos. Estos dos versículos hay que unirlos con el
versículo 20ª.
Aquí se presenta a Adán como modelo o señal del que había de
venir, el postrer Adán que es Cristo. Dos representantes diferentes de la raza
humana.
3.- Cristo nos consigue gracia y regalo espiritual de
Dios: (5:15) El don (carisma, regalo de gracia) de Dios y la
transgresión del hombre no están al mismo nivel. La gracia y el don de Dios son
mayores que los resultados de la transgresión (violar los límites impuestos por Dios) de Adán. Lo que Dios otorga
por medio de Jesucristo es abundante (Hechos 26:18). Compare con el versículo
20b. La gracia de Dios es más abundante que todas las consecuencias del pecado.
Note que todo ello es una
gracia y regalo de Dios, nadie lo puede ganar o conseguir (Romanos 4:16).
4.- Adán nos acarrea juicio y Cristo justificación: (5:16) Por causa de un solo pecado de Adán vino
juicio y condenación a toda la humanidad, pero por causa de los muchos pecados
Dios regaló (carisma) la
justificación por medio de Cristo. Declara al ser humano inocente en virtud de
la obediencia de Cristo (Romanos 3:24).
5.- Cristo nos hace reinar por Él: (5:17) Por causa del pecado de uno sólo la humanidad
hereda muerte, sin embargo, por medio de uno sólo que es Jesucristo muchos reinarán
en vida (Apocalipsis 1:5,6). Todo por la abundancia de la gracia de Dios y su
regalo de declararnos justos. Pero los beneficios son para quienes reciben (echan mano, alcanzan) esa gracia y don,
no es automático para la toda la humanidad.
6.- Adán acarrea condenación y Cristo absolución: (5:18) Por causa de la transgresión de Adán vino la
condenación (sentencia adversa con
castigo) a toda la raza humana, pero por la justicia de Jesús todo ser
humano ha recibido la oferta de ser declarado inocente para vida.
En
5:19 vemos que por la desobediencia de Adán toda persona es constituida (designada, establecida) pecadora, pero
debido a la obediencia de Jesucristo muchos pueden ser constituidos (designados, establecidos) justos (inocentes, santos). Note que las
consecuencias del pecado fueron automáticas, pero las consecuencias de la
obediencia de Cristo no son automáticas para toda la humanidad.
7. En Adán morimos, pero en Cristo tenemos vida eterna (5:21) En Adán el pecado produce muerte espiritual
(separación de Dios) y muerte física (separación del alma del cuerpo). Pero en
Jesucristo su gracia produce vida eterna. Un día Cristo nos resucitará para
jamás morir (1 Corintios 15:21).
III.- CONCLUSIÓN
Es importante reconocer lo que heredamos de Adán y que produce
de manera natural en nosotros pecado, muerte, juicio y condenación. Una sola
desobediencia de Adán contaminó la raza humana, a cada ser humano.
Pero es también importante saber y entender lo que Dios nos
otorga por su gracia y como regalo en Cristo. La perfecta obediencia de Cristo,
al que cree en Él le otorga justificación, reinar con Él, absolución de nuestra
culpa y vida eterna para siempre con Dios.
IV.- APLICACIÓN
Para los que ya son cristianos este capítulo 5 de Romanos es
esperanzador, nos da seguridad en Dios y debe producir en cada uno un corazón
agradecido que procura vivir para Dios en santidad y honor.
Para los incrédulos este capítulo debe producir
convencimiento de su estado de pecaminosidad, de absoluta necesidad del regalo
y los beneficios que sólo en Cristo se pueden recibir de parte de Dios. Este
capítulo puede ser usado por el Espíritu Santo para que acudas anhelante y con
premura a Dios creyendo en la persona y sacrificio de Cristo, en
arrepentimiento y entrega total al Señor Jesús.
Predicador: José
Amado Silvestre Marte