Texto: Apocalipsis Capítulo 16
Tema: Las 7 copas de la ira de Dios
I.-
INTRODUCCIÓN:
En Apocalipsis aparecen varios grupos de 7 cosas que Dios usa para anunciar la
ira que viene sobre la tierra: 7 Sellos, 7 Trompetas, 7 Copas (tazones). Lo que
se describe con cada una de estas cosas son hechos que suceden al mismo tiempo,
pero que al leer parecería que se suceden uno luego del otro; lo que sucede con
un sello es al mismo tiempo que la trompeta y la copa, pero nosotros leemos en
una dimensión, no podríamos entender si Dios lo describe al mismo tiempo.
En Apocalipsis 15:1 leemos de siete
ángeles que tienen siete plagas postreras que son la consumación de la ira de
Dios. Esta será la expresión final de su
ira, todas estas siete cosas serán el cumplimiento de la ira de Dios; no inicia
su ira aquí, inicia en el capítulo 6, aquí la expresa en grado sumo.
Hay que aclarar que la Iglesia ya no
estará, habrá sido llevada por el Señor antes de lo narrado a partir del
capítulo 6.
En 15:7 un ser viviente entrega a los
siete ángeles los tazones o copas conteniendo la ira de Dios. Observe que Juan
escribe inspirado por el Espíritu Santo en tiempo presente porque él estaba
viendo todo como que estaba sucediendo, pero recuerde que esto es futuro para
nosotros, aunque creo que no muy lejano ya.
II.-
DESARROLLO:
1.-
Úlcera maligna:
(16:1,2)
Dios hizo una advertencia en 14:9,10. No sólo sufrirán esta úlcera, luego les
seguirá fuego y azufre.
2.-
Destruida la vida marina: (16:3) El mar ya
había sido afectado y quedaba muy poco de él, ahora lo poco que quedaba será
destruido.
Hermano esto habla de una contaminación
ambiental en grado mayúsculo; imagine morir toda la vida marina, la
pestilencia, hambre, comercio y transporte marítimo detenido, etc.
3.-
Agua dulce convertida en sangre:
(16:4-7)
Ya las aguas dulces habían sido afectadas en 8:11 y se habían convertido en
amargas, no se podían beber. Ahora son convertidas en sangre lo que hace
imposible la vida en ellas y el consumo por parte de los seres vivos, no sirven
ni para reguío. La sangre tiene un olor que produce una reacción física en
algunos, imagine todas las aguas convertidas en sangre.
Dios está juzgando la sangre de sus
santos que los impíos derramaron (vs. 6,7; 6:9,10). Sus juicios son verdaderos
y justos, Dios les da lo que se merecen.
4.-
El Sol quema a los hombres:
(16:8,9)
Esto podrá ser con una explosión solar que lance enorme radiación sobre la
tierra, enormes lenguas de fuego que calienten de manera mayor que la usual.
Podría ser que la capa de ozono termine
por ser destruida por Dios. No se cuál método usará Dios, lo cierto es que el
calor abrazador será tal que las personas literalmente se quemarán al exponerse
directamente al Sol. Imagine el calor
sofocante que habrá aun a la sombra, aun de noche. Lo cierto es hermanos que
cada año hace más calor y aumentará hasta llegar a Apocalipsis 16.
Observe la maldad humana que en lugar
de buscar al que tiene poder sobre las plagas, lo que hace es blasfemar,
maldecir, hablar mal y no se arrepienten para darle gloria.
Imagine ese gran calor evaporando el
agua convertida en sangre y todo ese olor subiendo a las narices de los seres
humanos y los animales.
5.-
Oscuridad en el dominio de la bestia:
(16:10,11)
El ataque ahora es personal contra la bestia, contra uno de los miembros de la
trilogía maligna. La bestia, el anticristo y el falso profeta traen oscuridad
espiritual, Dios les trae oscuridad física.
La oscuridad será tan densa que ningún
artículo que ilumine servirá contra ella. Imagine dolor, llagas, sed y
pestilencia en medio de la oscuridad más densa que pueda existir. Recuerden lo
sucedido en Egipto cuando no quiso dejar salir a Israel (Éxodo 10:21).
Las personas tienen tanto dolor que
muerden sus lenguas y aun así encuentran tiempo para blasfemar el nombre de
Dios. Se mantienen fieles a la trilogía diabólica.
6.-
Dios seca el río Eufrates:
(16:12-16)
Desciende desde el Monte Ararat hasta
el Golfo Pérsico. Es la frontera oriental de la tierra prometida por Dios a
Israel. Se supone que por el calor
intenso del Sol los hielos del mundo se derretirán y que el caudal de los rios
aumentará, aunque a su vez el mismo calor evaporará una gran cantidad de agua;
sin embargo de manera sobrenatural Dios secará el Eufrates.
Al estar seco, será utilizado por unos
reyes del oriente que, inclinados por demonios enviados por la trilogía
diabólica (vs. 13,14), cruzan el cauce seco y se reunen todos en Armagedón (v.
16) (Har Meguido=Monte de Meguido).
Napoleón dijo que ese era el campo de batalla por excelencia debido a su
ubicación y tamaño.
Será allí la reunión para la batalla
final por el planeta y contra Israel, pero en verdad es el gran día del Dios
Todopoderoso. Absortos en pelear contra otros seres humanos, estos reyes del
oriente no se dan cuenta de que el verdadero guerrero desciende contra ellos
(v. 15)
En el versículo 15 se exhorta a los
creyentes durante la Tribulación a mantenerse vigilantes y firmes para no ser
avergonzados. Recuerde que todo lo dicho en estos capítulos no se aplica a la
Iglesia.
7.-
El gran terremoto y el granizo:
(16:17-21)
Aquí se escucha una voz desde el trono
que dice: Hecho está (v. 17up) Dios hace unos juicios como
nunca se han visto, sólo su poder evitó la destrucción total del planeta.
Dios envía un terremoto cual nunca se
ha visto, enorme, mundial y no limitado a una área geográfica determinada.
Nunca la humanidad ha visto un terremoto de tal magnitud (v. 18).
Este terremoto afecta a todas las
ciudades de las naciones, no quedará nación y ciudad sin tocar (v. 19). No
quedará monumento en pie, ni Las Vegas, ni Venecia, ni cataratas, ni el parque
de Hato Mayor, ni Faro a Colón, nada quedará sin tocar.
Para mí es triste lo que dice el
versículo 20: Y toda isla huyó... La Isla de Santo Domingo no aparecerá
en su lugar, me imagino que ni las Antillas Mayores. Lloré cuando leí esto y al
preparar esta predicación al pensar en mi país y mi pueblo.
Imagino el gran tsunami que arrasará
las islas y costas de todo el planeta. Si el de Japón penetró 9 kilómetros
tierra adentro y llegaron inundaciones hasta la costa oeste de los EE.UU.A,
imagine con un terremoto que mueva el globo terráqueo.
Habrá un inmenso cambio geográfico, las
capas tectónicas que componen la tierra se moverán de tal manera que los montes
desaparecerán. No habrá el Cañón del Colorado, el Everest, etc. “...y los
montes no fueron hallados” (v. 20)
Pero además de todas las plagas y de la
gran destrucción geográfica, vendrá algo final: un enorme granizo de unos 34 a
40 kilogramos de peso. Imagine la destrucción de casas, seres humanos
aplastados, cubiertos por el granizo. El castigo bíblico por la blasfemia es la
muerte a pedradas (Levítico 24:10-16). El
anticristo y los moradores de la tierra han estado blasfemando el Nombre de
Dios desde el comienzo. Y ahora viene la fase del castigo. En lugar de piedras
Dios envía granizo de manera sobrenatural, el enorme calor del Sol evapora las
aguas y Dios las solidifica para convertirlas en granizo. ¡Oh la sabiduría de
Dios!
III.-
CONCLUSIÓN:
Hemos visto lo que Dios tiene preparado para la humanidad al final de los
tiempos en la época de la Tribulación, todo el dolor que habrá en la tierra
luego de la partida de la Iglesia, toda la destrucción. Lo que describe
Apocalipsis 16 no se ha visto nunca ni se verá después. Pienso que es
importante que medites en lo que describe Dios allí por medio de Juan.
IV.-
APLICACIÓN:
-
¿Estás seguro o segura de tu salvación?
-
¿Tienes plena seguridad de que no pasarás por la Tribulación?
-
Si Cristo viene hoy por los suyos: ¿Te llevará también con Él?
-
¿Estás predicando el evangelio para que más gente se vaya con el Señor?
-
Si no eres cristiano debes arrepentirte y convertirte en este momento, hoy.
Debes tener plena seguridad de que tienes vida eterna. Si Cristo viene hoy y te
encuentra sin arrepentir, siendo simple religioso te quedarás y pasarás por
todo lo descrito en Apocalipsis.
Predicador: José Amado Silvestre Marte.